No por las suyas, afortunadamente. | RIA Novosti.
Los granjeros estonios han recibido avisos fiscales por la emisión de metano de su ganado, según ha denunciado el principal partido de la oposición, la Unión Popular Estonia.
Los rumiantes producen grandes cantidades de metado en forma de eructos y pedos cuando digieren la hierba, lo que supone un 15 a 25% del total de emisiones de este gas, según diversas estimaciones. Una sola vaca produce una media de 350 litros de metano y 1500 litros de CO2 al día.
«Para Copa-Cogeca, una organización de engloba a granjeros de la Unión Europea (UE), la información recibida de los granjeros estonios ha supuesto una enorme sorpresa, carente de precedente alguno en el resto de la UE», declaró el portavoz del partido, Jaanus Marrandi.
Aunque actualmente ningún país de la UE cobra impuestos por flatulencias a los granjeros, la autoridades neozelandesas sí establecieron una tasa en tal sentido un año después de adherirse al protocolo de Kioto, debido que en Nueva Zelanda el ganado es responsable del 90% de las emisiones de metano del país y del 43% de las de gas de efecto invernadero.
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