1 de julio de 2008

Bares de Barcelona prohíben a los chinos jugar a las tragaperras

Para evitar que ganen. | 20minutos.

En los bares de Barcelona han comenzado a ser habituales los rótulos que prohíben jugar a ciudadanos de origen chino a las tragaperras, debido a la presencia en la zona de grupos organizados de jugadores chinos que, sin manipular las máquinas, son expertos en detectar el sonido de la moneda y obtienen siempre el mayor premio, 240 €, con una pequeña inversión.

En la calle Arnau d'Oms, en un bar regentado por chinos, un rótulo en los dos idiomas anuncia la prohibición de jugar en las máquinas a sus compatriotas «por una cuestión de imagen». Admiten, no obstante, que «los chinos juegan y ganan mucho».

«No manipulan los aparatos, ni los circuitos», lo que, según explica Javier Rupérez, un instalador de máquinas recreativas de Mataró, «sería imposible ya que las combinaciones varían de forma automática». Saben, eso sí, cuánto tardará el premio gordo en caer en función de las combinaciones concretas en el bombo y cuando la moneda cae en la plataforma interior.

Fuentes policiales informan que se trata de grupos organizados que «han importado los trucos» de su país de origen y que, incluso, en alguna ocasión se han llegado a incautar instrucciones con grafía china. Establecidos en Barcelona, se reparten zonas y envían a hacer la ruta a subordinados que apuestan con métodos estudiados en origen, teniendo en cuenta que los asiáticos son los principales importadores de maquinaria recreativa.

No hay comentarios: