9 de abril de 2008

Un nuevo estudio afirma que las caras revelan las intenciones sexuales

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Un reciente estudio publicado en la revista Evolution and Human Behavior afirma que las mujeres pueden determinar de un simple vistazo si el hombre que se les aproxima busca únicamente sexo o quiere una relación más profunda, a partir de la forma de la mandíbula, el tamaño de la nariz o el aspecto de sus ojos, entre otros rasgos faciales.

El estudio concluye que las mujeres saben instintivamente que los hombres con mandíbula cuadrada, ojos pequeños y narices grandes, rasgos propios de la masculinidad, están más interesados en el pacer a corto plazo que en el compromiso. Por esto, las mujeres suelen responder más favorablemente a rasgos más suaves y ligeramente más femeninos.

Igualmente, los hombres pueden averiguar, aunque con menor tasa de éxito, si una mujer tiene una actitud relajada hacia el sexo o mantiene unas opiniones más tradicionales.

El estudio se basó en las respuestas de 700 hombres y mujeres a los que se le mostraron fotografías de veinteañeros, así como imágenes compuestas deliberadamente como representación de los rostros promedio de hombres y mujeres que mostraban buena disposición a prestarse al sexo ocasional, así como de quienes preferían relaciones más duraderas.

Los investigadores hallaron que las percepciones instantáneas no solo jugaban un papel importante en la selección de compañeros, sino que la interpretación de las caras era más acertada que errónea al determinar la actitud respecto al sexo ocasional.

Lynda Boothroyd, de la Durham University y directora del estudio, dijo que los hallazgos sugerían que era posible juzgar la estrategia sexual de un individuo simplemente mirando su rostro. «Las preferencias hacia diferentes tipos de cara eran bastante fuertes», afirmó. «Esto demuestra que las impresiones iniciales pueden ser parte de la forma en que evaluamos a potenciales compañeros —o rivales— cuando los vemos por primera vez.»

Ben Jones, de la Universidad de Aberdeen, dijo que ya se había hallado antes que puede juzgarse mucho a partir de la cara de alguien, como su salud o rasgos de su carácter, pero este nuevo estudio es el primero en demostrar que la naturaleza romántica puede leerse en el rostro.

Los investigadores quedaron perplejos al comprobar que las mujeres que probablemente estuvieran más dispuestas a una relación de una sola noche eran consideradas las más atractivas. Se ha sugerido que la falta de esfuerzo necesario por parte de los hombres les compensaba por «los costes de la ruptura de una relación a corto plazo».

Este nuevo estudio viene a confirmar el resurgimiento que la fisiognomía está experimentando en los albores del siglo XXI como disciplina científica de prestigio.

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