Un sacerdote ruso empezó a proferir palabrotas tras descubrir que había sido engañado para dar su sagrada bendición a un bar de estriptís.El padre Nikolai, de la Iglesia de los Sagrados Apóstoles Pedro y Pablo, bendijo el club de estriptís Studio 74 en la ciudad de Cheliábinsk en el transcurso de una ceremonia que fue televisada por las emisoras locales. El sacerdote ortodoxo afirman que no tenía idea de que se trataba de un club de estriptís y que había sido engañado por los propietarios del local, que le habían dicho que era una escuela para entrenar a bailarinas de ballet.
El Arzobispo Teofilacto, vicario de la eparquía de Cheliábinsk, declaró: «El padre Nikolai fue solicitado para bendecir una tienda. Él no vive en la zona; es de un pequeño pueblo a las afueras de la ciudad. No tenía idea de que era un club nocturno y no una tienda: las mesas de dentro no parecían sospechosas. Creó que el club nocturno era una cafetería normal. El padre Nikolai también fue solicitado para bendecir la tienda sin cobrar nada, por lo que la iglesia no recibió nada.»
La portavoz de Studio 74 Anna Usmanova declaró: «No le dijimos que nuestro club fuese una tienda. Estaba claro que hablábamos de un club nocturno desde el principio. Además, el padre Nikolai no bendijo la sala de estriptís, sino solo la pista de baile.»
«Desde que se realizó esta ceremonia sagrada en nuestras instalaciones nuestros clientes dicen que han experimentado una atmósfera completamente nueva, y viene más gente. La bendición parece estar funcionando», añadió Usmanova.
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