La había cargado con perdigones. | Yakima Herald.
La policía de Yakima (Washington) ha informado que los amigos del veinteañero que se disparó accidentalmente en la ingle tras meterse en los pantalones una escopeta recortada declararon inicialmente que había recibido el disparo desde un coche.
El joven, que sufrió graves heridas en la ingle, fue trasladado por aire al Harborview Medical Center de Seattle, donde evoluciona favorablemente. Los policias que le encontraron dedujeron rápidamente que las heridas no se correspondían con las declaraciones, por lo que realizaron registros por los inmuebles de alrededor y confirmaron la sospecha de que se había disparado él mismo.
El capitán Greg Copeland dijo que los dos cañones de la escopeta se dispararon accidentalmente cuando por razones desconocidas el hombre, que la había cargado con cartuchos de perdigones, se la metió en los pantalones. El arma había sido serrada ilegalmente.
Durante el registro, los oficiales también hallaron una pistola semiautomática Ruger de 9 mm que había sido robada en Spokane. Copeland dijo que la policía esperaba presentar cargos contra el joven, que tiene un largo historial delictivo, incluyendo condenas por asalto, robo y drogas.
No está claro si en la actualidad es un pandillero en activo.
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