Su mano derecha le describe como un «diamante en bruto con un robusto sentido del humor». | AFP.
El líder del Partido Liberal conservador de Australia occidental, Troy Buswell, confesó en una rueda de prensa que había olisqueado la silla de una compañera.
Buswell, que ya confesó en otra ocasión que tiró del tirante del sujetador de una oficinista del partido contrario, explicó a los periodistas que no renunciaría su puesto, que le permitiría acceder al cargo de primer ministro si su partido ganase las elecciones el próximo año.
Las lágrimas acudieron a sus ojos cuando se le preguntó cómo había reaccionado su familia a la amplia publicidad dada al incidente desde que la historia se hizo pública. Tras una breve pausa para tomar un vaso de agua, explicó: «Son temas difíciles de tratar para mí y son muy difíciles para mi familia.»
La mujer implicada en el incidente, una oficinista del Partido Liberal que no desea hacer pública su identidad, dijo que Buswell olisqueó la silla en la que había estado sentándose en su oficina del parlamento en diciembre de 2005. El incidente tuvo lugar frente a otros oficinistas y se llevó a cabo para hacerles reír. «Me indigné y me enfurecí y se lo dije», contó la mujer.
Buswell había admitido previamente que tiró del sujetador de una oficinista del Partido Laborista, que actualmente gobierna el estado, y ha sido acusado por una legisladora jubilada de hacerle comentarios sexistas. Kim Hames, mano derecha de Buswell, le apoyó públicamente describiéndole como un «diamante en bruto con un robusto sentido del humor». Hames explicó que Buswell necesitaba cambiar su comportamiento, pero añadió que no hay nadie para sustituirle como líder del estado en el Partido Liberal.
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